CALIDAD DE VIDA Y OBESIDAD

Existen estudios que demuestran que la calidad de vida está relacionada con la salud del paciente obeso, el cual se deteriora en varios aspectos: capacidad física, bienestar psicológico, funcionamiento social, etc. Por tal razón, muchas de estas personas se someten a intervenciones quirúrgicas para mejorar en primera instancia problemas de salud física, del mismo modo, para subsanar aspectos psicológicos que los afectan. Se ha evidenciado que, una vez realizadas las operaciones la percepción de las relaciones interpersonales, estado emocional y el cambio en la apariencia física, modifican de manera positiva la idea subjetiva que se tenía respecto de la calidad de vida. La persona se siente mucho más satisfecha con la nueva imagen física y psicológica que posee.

Los patrones culturales, las influencias sociales y los hábitos aprendidos en el hogar influyen significativamente en la conducta alimentaria. Es menos probable ver a adolescentes varones obesos en comparación con las mujeres adolescentes, puesto que cerca de un 76% de ellos realizan actividades físicas fuera del horario escolar, fomentando el cuidado corporal e incidiendo en un óptimo desarrollo de habilidades sociales e interpersonales. En cambio, las mujeres, en su mayoría, no presentan comportamientos relacionados con la actividad física, siendo una probabilidad en el aumento de peso. Cuando un adolescente percibe una mala calidad de vida, los padres también son capaces de percibir que algo no está funcionando bien en sus hijos, un estudio encontró que los padres perciben que la esfera emocional es la más afectada en sus hijos obesos, ya que ellos presentan dificultades para conciliar el sueño, irritabilidad y miedo al contacto social, imposibilitando que el adolescente se desarrolle normalmente respecto a lo esperado para su etapa evolutiva.

El hecho de presentar problemas de sobrepeso u obesidad durante la infancia o adolescencia incide en la probabilidad de continuar con la enfermedad durante la vida adulta, por lo que es necesario prevenir o controlar la enfermedad para que no continúe su curso en la adultez. Además, la obesidad actúa como un factor de riesgo comórbida con enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial, diabetes, entre otras. Estas patologías acortan la expectativa de vida y deterioran la calidad de vida.

Psi. Carmen Rosa Arones Perez

 

 

 

REFERENCIAS

Carbajal, Y. & et al. Calidad de vida relacionada con la salud en pacientes con obesidad. Revista Cubana de Medicina Física y Rehabilitación 8(2):48-60. Recuperado de https://www.medigraphic.com/pdfs/revcubmedfisreah/cfr-2018/cfr181d.pdf

Mercado, M. calidad de vida percibida en personas obesas. Revista Integración Académica en Psicología 4(11):88-92. Recuperado de https://integracion-academica.org/attachments/article/132/08%20Personas%20obesas%20-%20MMercado.pdf