UN FERRARI SIN FRENOS

Alguna vez has conocido a un niño que se le dificulta atender, tiene excesivos movimientos, le cuesta estar quieto en un solo lugar por un determinado tiempo y es impulsivo a la hora de hablar como no respetar su turno y manifestar que se aburre fácilmente, y todo aquello lo presenta en dos o más áreas de su vida, bueno si es así estamos hablando de las característica que un niño con TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad) puede presentar.

Hoy en día sabemos que no es que el niño le gusta ser así, o quiera llamar la atención, más bien no lo pasan nada bien, aparte de que son conductas que no lo pueden controlar tienen que sobrellevar toda la presión familiar, social y etiquetas que le suelen colocar, por ejemplo el “niño malcriado, rebelde o tonto”.

Según las investigaciones no hay una causa específica, pero sí que es un trastorno neurobiológico y tendría que ver con las funciones de la corteza prefrontal y su interacción con las hormonas de la dopamina, serotonina y noradrenalina; por lo general es un trastorno que se encuentran más en niños que en niñas, para poder diagnosticarlo tiene que realizarse una ardua evaluación por diferentes especialistas.  Es importante hacer un diagnóstico diferencial, y tener en cuenta que es un trastorno que puede venir acompañado con otros tipos de trastornos como ansiedad, conductas oposicionista desafiante, etc. Una vez diagnosticado y dependiendo el nivel que se encuentre se realiza tratamientos farmacológicos, psicológicos y orientación para los padres y la escuela, es una intervención multidisciplinaria, si es el caso de un TDAH leve se intenta primero solo con el tratamiento psicológico y la orientación respectiva.

Si no recibe tratamiento adecuado, es muy probable que de adultos sean personas que gozan del peligro constante como carreras de autos, deportes extremos;  adictos a diferentes drogas, tengan una vida desorganizada, no terminen ningún estudio, estén envueltos en diferentes casos delictivos, etc.

Hay que tener en claro que es un trastorno que no se cura, va a estar presente toda la vida y uno aprende a convivir con eso, lo que se busca con el tratamiento es darle las herramientas adecuadas para que tenga una calidad de vida y pueda sacar provecho todas esa cualidades que posee.